El Montañismo me da la oportunidad de conocer lugares asombrosos.

miércoles, 21 de agosto de 2013

Leccion de Vida

Hace algunas semanas acudí con un grupo de amigos con los que practico deportes extremos al lugar conocido como el Pozo de los Gavilanes en el Municipio de Galeana Nuevo León. La idea era llegar al lugar y con la técnica del rappel bajar los mas de 100 metros de profundidad de aquel pozo natural tan singular.

Llegamos al lugar y sin más procedimos a vestir la indumentaria adecuada para la tarea, así una vez que estuvimos listos procedimos a bajar por aquel pozo en cuyo fondo se encontraba una especie de lago del que se dice tiene más de 20 metros de profundidad. Ahí nos refrescamos nadando y descansamos de lo que fué el descenso...seguía ahora el ascenso...

Debo reconocer que me encotraba con la adrenalina a mil por aquella experiencia y sumamente motivado para iniciar el ascenso, me sentía capaz de cualquier cosa, por lo que procedí a llevar a cabo el ascenso con mucha rapidez, haciendo un gran esfuerzo físico, principalmente en los brazos; Cuando llevaba algunos 50 metros empecé a sentir fatiga física, pero confiaba en que la distancia por subir ya era menor. Justo algunos 7 ú 8 metros a llegar a la cima, mi agotamiento físico fué total, me sentía incapaz de poder subir aquella corta distancia, no había más fuerzas en mi... Entonces hice una pausa, cerré mis ojos y vinieron a mi mente palabras que mi padre me decía cuando de niño prácticaba karate: "No todo está en el cuerpo, también la mente y sobre todo el corazón enfrentan el combate"... sentí una paz recorrer mi cuerpo, y fué entonces que comencé a subir el último tramo. Finalmente llegué a la cima.

Aquella experiencia me ha hecho pensar mucho en la propia vida, como dosificamos nuestros talentos y habilidades, y sobre todo en aquellos momentos en que sentimos que no podemos avanzar más, que nuestros problemas nos han superado, que son más fuertes que nosotros. Es entonces que debemos cerrar los ojos y traer a la memoria lo que nos hace fuertes, sacar del corazón la fortaleza y la fé necesaria para creer que todo tiene un mejor mañana. Les aseguro que estoy convencido de ello...



 

jueves, 8 de agosto de 2013

El Señor de la Expiración

Siendo yo muy niño conocí la historia del Señor de la Expiración, patrón de Cd. Guadalupe. Esta semana (9 de agosto) se celebran las fiestas patronales y es el mejor pretexto para compartir a ustedes una de las tradiciones mas fuertes que existe en Guadalupe.

El historiador Israel Cavazos Garza en su libro "El Señor de la Expiración del Pueblo de Guadalupe" detalla la historia:

"… Sucedió en una mañana, cuando se percibían apenas las primeras luces del alba. Los indios despertaron sobresaltados y corrieron presurosos a la Capilla, porque oyeron el tañer de la campana. Y su sobresalto fue mayor aun, al darse cuenta de que no era el indio Sacristán quien la sonaba, sino un asno que movía el cuello y jalaba la cuerda con el hocico.

Pesada carga traía en sus lomos la bestia. –algún mercader la habrá extraviado- se dijeron, pero en vano buscaron en el camino; ni siquiera huella reciente encontraron de alguna recua en el sendero.

Aunque con el temor consiguiente, libraron de tal peso al borrico; y cuando pusieron en el suelo el lago cajón de toscas y mal enclavadas tablas, notaron que su contenido era una imagen del Señor crucificado y en tamaño natural. Postrándose de hinojos ante la visita tan providencial; lloraban unos, conmovidos por la expresión del rostro del Señor; otros se santiguaban con ademán de asombro y regocijo.

Introdujeron al Cristo en la Capilla, sustituyendo con él la gran cruz de madera que destacaba en el fondo, y que había sido venerada hasta entonces como titular de la hacienda primitiva.

Tan desbordante fue el júbilo, que nadie supo más del cansado jumento que habían dejado junto a la puerta. Los buscaron mucho por entre los matorrales y sembradíos; todo fue inútil, no lo encontraron; sin embargo se cuenta que lo encontraron muerto de cansancio cerca de la puerta norte de la Capilla y que ahí mismo le dieron sepultura.

Desde entonces se venera esta imagen en lo que ahora es la Parroquia y Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe. El historiador Dr. José Eleuterio González (Gonzalitos) expresa lo siguiente: “Yo me acuerdo haber visto en el libro de Bautismos del pueblo de Guadalupe un papel suelto firmado por Fray Juan Antonio Manuel del Alamo, en que decía: cuando el Padre Margil pasó por este pueblo, tocó el Santísimo Cristo de la Expiración que aquí se venera”. El Padre Margil, a quien aludía al Padre Alamo fue el célebre misionero Fray Antonio Margil de Jesús, que en la Cuaresma de 1714 vino al Nuevo Reino de León y estuvo en varias misiones, visitando entre ellas a Guadalupe durante los primeros meses de 1715. Para este entonces la imagen ya estaba en la Capilla que ahora es el Santuario del Señor de la Expiración.

Con lo anterior podemos ver que la imagen ya se encontraba en esas fechas en que Guadalupe fuera fundado en 1716; esa es la razón por la cual el escudo del Municipio hace alusión al Señor de la Expiración llevando su corona en uno de los cuarteles y adornado con dos estrellas que simbolizan a la Virgen de Guadalupe, es decir poniéndose bajo el amparo de los dos Patronos de nuestra comunidad y de nuestra ciudad."

El templo está frente a la plaza principal de Guadalupe N.L. data del siglo XVII. El Señor de la Expiración que en ocasiones es llamado "El Señor del Pueblo" o el "Señor de la lluvia". En tiempos de sequía se ha sacado a peregrinar la imagen para pedir que llueva. Es fama tambíen que en tiempos de sequía era llevado a Monterrey a solicitud del Ayuntamiento de la Ciudad o del Gobierno de Nuevo León.
 
Vale la pena conocer el templo, la imagen, la tradición, el corazón de cada pueblo está en sus tradiciones y en el corazón de Ciudad Guadalupe está el Señor de la Expiración.